El mantenimiento de rotatorios es fundamental en odontología para garantizar su óptimo funcionamiento y prolongar su vida útil. Consiste en realizar limpieza, lubricación y esterilización regularmente según las recomendaciones del fabricante. Se debe inspeccionar periódicamente las piezas en busca de desgaste o daños, y reemplazarlas si es necesario para evitar problemas durante los procedimientos. Es importante seguir los protocolos de mantenimiento adecuados para prevenir la contaminación cruzada y garantizar la seguridad del paciente y del personal. Un mantenimiento de rotatorios adecuado contribuye a mantener la precisión, eficiencia y confiabilidad de los instrumentos en la práctica clínica.